
¡Hola a todos! Soy Jesús López, Jesús2 para los amigos (y para Google 😉). Si estás por aquí, seguramente has oído campanas sobre que Google se ha puesto «serio» con los enlaces, que si el link building ha muerto, que si comprar enlaces es el camino al infierno SEO… ¡Respira! Que no cunda el pánico.
Como sabes, me encanta descomplicar lo complicado. Soy ese SEO que prefiere explicarte las cosas con manzanas (o con analogías que hasta mi abuela entendería) antes que soltarte un rollo técnico que no te sirva para nada. Y hoy vamos a hablar de enlaces, de cómo conseguirlos en 2025 y, sobre todo, de cómo hacerlo bien. Porque sí, el link building ha cambiado, ¡y mucho! Pero no, no ha muerto. Solo se ha hecho mayor y más listo.
Rebobinemos: ¿Qué Narices es un Enlace y Por Qué Eran (y Son) Importantes?
Imagina que tienes una panadería nueva en el barrio. ¿Cómo sabe la gente que tu pan es el mejor? Porque otras personas hablan de ti, ¿verdad? Si el carnicero, la pescadera y la señora del quiosco (gente respetada en el barrio) le dicen a sus clientes: «Oye, el pan de Jesús está de muerte», la gente empezará a venir.
En Internet, los enlaces son esas recomendaciones. Cuando otra web pone un enlace hacia la tuya, le está diciendo a Google (y a sus usuarios): «Oye, esta página de Jesús2 es interesante y relevante para este tema». Durante años, Google ha usado estos «chivatazos» como una señal súper importante para decidir qué páginas merecen estar arriba en los resultados de búsqueda.
El «Salvaje Oeste» del Link Building: Cuando Todo Valía

Aquí es donde la cosa se puso… interesante. Durante mucho tiempo, la estrategia era conseguir enlaces a cascoporro. Daba un poco igual de dónde vinieran. ¿Una web rusa de venta de neumáticos enlazando a tu blog de recetas veganas? ¡Palante! ¿Comprar 1000 enlaces por 5 euros en una plataforma sospechosa? ¡Dame dos!
Era el Salvaje Oeste. La cantidad importaba más que la calidad. Conseguir enlaces era como coleccionar cromos: cuantos más tuvieras, mejor, sin importar si eran repetidos, estaban rotos o eran del futbolista que siempre estaba en el banquillo. Y sí, funcionaba… hasta que Google dijo: «¡Se acabó la fiesta!»
2025: Google Pone Orden (¡Y Menos Mal!)
Google no es tonto. Su objetivo es que tú, cuando buscas algo, encuentres lo mejor y más relevante. Y se dio cuenta de que ese sistema de «todo vale» con los enlaces estaba ensuciando los resultados. Webs malillas posicionaban solo por tener miles de enlaces basura, mientras que contenidos geniales se quedaban en el olvido.
Así que, especialmente con las últimas actualizaciones que hemos visto hasta este 2025, Google ha afinado su lupa. Ahora es como ese portero de discoteca que mira tu DNI, te analiza de arriba abajo y decide si entras o no. Ya no vale cualquier recomendación; ahora quiere recomendaciones de calidad.
¿Significa Esto que Comprar Enlaces es Ilegal, Peligroso o Inútil?
¡Rotundamente NO! Aquí está la clave: comprar enlaces sigue siendo una estrategia útil y válida en 2025. ¡Ojo! He dicho útil y válida, no fácil ni sin riesgo.
Lo que ha cambiado es el CÓMO. Se acabó comprar enlaces a ciegas. Ahora tienes que ser selectivo, un estratega, casi un detective privado de los enlaces. Tienes que invertir, no gastar.
La Nueva Lista de la Compra para tus Enlaces en 2025: ¡Calidad, Cariño, Calidad!
Antes de conseguir (o comprar) un enlace, saca tu libreta (o tu Notion, o lo que uses) y revisa estos puntos como si te fuera la vida en ello (bueno, la vida de tu web):
1. ¿Es Relevante de Verdad? ¡La Temática Manda!
- Antes: Daba igual.
- Ahora: ¡Es CRUCIAL! Si tienes una web sobre cómo adiestrar perros, necesitas enlaces desde webs de perros, veterinarios, tiendas de mascotas… no desde un blog de física cuántica (a no ser que hables del perro de Schrödinger, ¡y ni así!).
- Piensa como tu abuela: Si buscas la mejor receta de tortilla de patatas, ¿confías más en la recomendación de Karlos Arguiñano o en la del mecánico de tu barrio? Pues eso. Google quiere que las recomendaciones vengan de «expertos» en el tema.
2. ¿La Web que te Enlaza es de Fiar? Investiga su Reputación.
- Antes: ¿Tiene PageRank? ¡Compro!
- Ahora: ¿Esta web es seria? ¿Publica contenido de calidad? ¿Tiene una audiencia real o es una granja de enlaces cutre? ¿Parece natural o huele a spam a kilómetros?
- Piensa como tu abuela: ¿Prefieres que te recomiende el médico del pueblo, conocido por todos, o un tipo sospechoso en un callejón oscuro que te ofrece «remedios milagrosos»? Google prefiere al médico, ¡claramente!
3. ¿El Enlace Parece Natural? El Contexto Importa (y Mucho).
- Antes: Un enlace perdido en el pie de página o en una lista infinita de enlaces.
- Ahora: El enlace debe estar DENTRO del contenido, rodeado de texto que tenga sentido con tu página. Debe parecer una recomendación genuina, no un pegote publicitario.
- Piensa como tu abuela: Si estás leyendo una receta y, justo cuando hablan de los huevos, te dicen «por cierto, los mejores huevos camperos los encuentras en [tu web]», tiene sentido. Si te ponen un enlace a tu tienda de huevos en medio de un artículo sobre cómo arreglar grifos… ¡sospechoso!
4. ¿Esa Web Tiene Tráfico Real? ¡Que No Sea un Pueblo Fantasma!
- Antes: Mientras Google lo viera, bastaba.
- Ahora: Un enlace desde una web que no visita ni el tato… ¿qué valor real tiene? Google cada vez valora más si los enlaces pueden traer tráfico real de usuarios interesados.
- Piensa como tu abuela: Poner un cartel publicitario de tu panadería en medio del desierto no sirve de mucho, ¿verdad? Mejor ponerlo en la plaza del pueblo, donde pasa la gente.
5. ¿Cómo es el Perfil General de Enlaces de la Web? Huye de lo Artificial.
- Antes: ¡Más es más!
- Ahora: Google mira el conjunto. ¿Todos tus enlaces vienen del mismo tipo de web? ¿Has conseguido 500 enlaces en un día? ¡Mal asunto! Busca un crecimiento natural y diverso.
Extra Ball: ¡Compara Precios y Condiciones Antes de Comprar!
Una vez que has hecho tu labor de detective y has encontrado un sitio que parece bueno, relevante y de fiar… ¡no te lances a comprar en la primera plataforma que pilles! Aquí viene otro punto clave: los precios del MISMO enlace pueden variar (¡y mucho!) entre distintas plataformas de compraventa de enlaces (como Getalink, Prensalink, Publisuites, Growwer, etc.).
Mira este ejemplo: para un mismo sitio web, una plataforma podría pedirte 120€, otra 139€, otra 238€ y otra 278€. ¡Casi nada!

Importante: Esto no significa que una plataforma sea siempre la más cara y otra la más barata. Depende del acuerdo que tengan con cada medio. Para un sitio, Publisuites puede ser la más económica, y para otro sitio diferente, quizás lo sea Prensalink o Getalink. Tu trabajo es comparar.
Además del precio, fíjate bien en qué incluye: ¿te escriben ellos el artículo o tienes que aportarlo tú? A veces, un precio un poco más alto compensa si te ahorra el trabajo de redacción. ¡Lee la letra pequeña!
👉 Plataformas Recomendadas (¡Aquí es ponde pongo Enlaces de Afiliado! 😉) 👈
Si quieres empezar a explorar, aquí te dejo algunas de las plataformas más conocidas donde puedes buscar y comparar enlaces.
Entonces, ¿Qué Hago, Jesús2?
Fácil (bueno, sencillo de entender, que no es lo mismo que fácil de hacer 😉):
- Investiga, investiga, investiga: Antes de comprar o pedir un enlace, analiza la web a fondo con los puntos de arriba. Y para esto, seamos sinceros, vas a necesitar herramientas. Olvídate de hacerlo a ojo o con métricas gratuitas poco fiables. Es prácticamente obligatorio usar una herramienta de análisis SEO potente como Ahrefs, Semrush o SE Ranking. Estas herramientas te darán datos sobre la autoridad real, el tráfico estimado, la calidad de los enlaces que recibe esa web, etc. No te fíes solo de las métricas que te den en las plataformas (DA, PA, DR… están bien como pista inicial, pero profundiza con tu herramienta). Mira la web con tus propios ojos y con los datos de una buena herramienta.
- Prioriza la calidad sobre la cantidad: Es MIL VECES mejor UN enlace bueno, relevante y natural que CIEN enlaces mediocres o malos.
- Piensa a largo plazo: El link building es una maratón, no un sprint. Construye relaciones, busca webs afines, aporta valor.
- Si compras, que sea con cabeza: Compara precios y condiciones. Invierte en enlaces en sitios de calidad que pasen tu «lista de la compra» y tu análisis con herramientas. Sí, serán más caros. Pero la alternativa es tirar el dinero o, peor aún, arriesgarte a una penalización de Google.
El link building en 2025 es más estratégico, más enfocado en la calidad y, si me preguntas a mí, ¡mucho más interesante! Es como pasar de jugar a las damas a jugar al ajedrez. Requiere más coco, pero la recompensa es mayor.
Se trata, como casi todo en SEO y en la vida, de ponerse en los zapatos del usuario (y ahora también, en los de Google). Si el enlace aporta valor real, es relevante y parece natural… ¡vas por buen camino!
¡Ojo! Un pequeño recordatorio importante… ☝️
Conseguir enlaces de calidad es genial, ¡pero asegúrate de que apuntan a una página que esté perfectamente optimizada! De nada sirve traer invitados a una casa desordenada, ¿verdad? 😉 Si quieres repasar cómo tener tu contenido a punto, echa un vistazo a mi…
➡️ Guía definitiva de optimización on-page para que no se te escape nada
¡Y ahora te toca a ti! ¿Qué te ha parecido este repaso al link building de 2025? ¿Te ha quedado más claro? ¿Sigues teniendo dudas? ¿Has tenido alguna experiencia (buena o mala) comprando enlaces últimamente? ¿Comparas precios entre plataformas?
Déjame un comentario aquí abajo. Me encanta leer vuestras historias y opiniones. Y si eres principiante y te sientes un poco perdido, recuerda que tienes mi grupo SEO en Telegram donde intento echar una mano a los que empiezan. ¡Compartir es vivir (y posicionar)!
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¡Gracias por leerme y hasta la próxima!
Me ha gustado mucho la forma de explicarlo, Jesús. Es todo lo que pienso sobre los enlaces. ¡Lo difícil es encontrar esas webs que cumplen con todas las condiciones! Hay mucha basura en el mercado.
¡Gracias por escribir! ¡Por más contenidos así!
¡Gracias, RenzoSEO!
Totalmente de acuerdo contigo: lo complicado no es entender qué es un buen enlace, sino encontrarlo entre tanta morralla. Hay mucho «todo vale» en el mercado y toca afinar el radar. Al final, creo que la clave está en priorizar calidad sobre cantidad y en pensar siempre: ¿yo pondría este enlace en mi web si no fuera mío?
Un abrazo, y gracias de verdad por leer y comentar. ¡Se vienen más contenidos, seguro! 💪